miércoles, 28 de agosto de 2013

El cuento de la criada


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Argumento: 

"En EEUU se instaura un régimen teocrático que supedita por ley las mujeres a los hombres; sus nombres indican de qué hombre son propiedad - Ofharry (Of harry = de Harry) siendo valoradas por su capacidad reproductiva ya que hay problemas de fertilidad en esta nueva sociedad. Una mujer nos cuenta su realidad como criada y la de otras mujeres en su misma situación "

Lo leí hace mucho tiempo y se había  quedado en casa cómodamente instalado, a pesar de sucesivas purgas de libros, hasta que se rompieron las tapas y empezaron a soltarse sus hojas - tengo pendiente volver a comprarlo.

Releía capítulos para repasar detalles del relato de una mujer valorada sólo porque puede dar hijos, las hijas no es lo mismo claro. Que ya no tiene derecho a tener una cuenta corriente, ni a un trabajo y que se las obliga a vestir de una manera concreta para que la identifique de manera clara, y que hasta su nombre ha perdido - ahora responde al nombre del hombre al que legalmente pertenece.

No es un libro para evadirse, sino para reflexionar sobre la situación que plantea y la situación que aún se da para las mujeres en muchos países del mundo.

Recomendado - a quien le gusta un libro que le haga pensar

Abstenerse - si buscas evasión o si vives permanentemente en un mundo color rosa palo 

El cuento de la criada


Hace ya mucho tiempo leí el libro El cuento de la criada de Margaret Atwood, decir que me gustó no se ajusta a la realidad, más bien diría que es un libro para ser apreciado, leído con calma y reflexionar sobre el futuro que nos cuenta:


En EEUU se instaura un régimen teocrático que supedita por ley las mujeres a los hombres; sus nombres indican de qué hombre son propiedad - Ofharry (Of harry = de Harry) siendo valoradas por su capacidad reproductiva ya que hay problemas de fertilidad en esta nueva sociedad.

Sin proclamar que el Apocalipsis ya está aquí para las mujeres, sí que veo en las noticias situaciones que en el siglo XXI creía que serían cosas del pasado, y otras nuevas que no había imaginado. Una pequeña muestra:





Violencia de género en España

Al que nos sigan matando en todo el mundo como perras, olvidemos la expresión "violencia doméstica" de una vez por todas, y tengamos las gargantas roncas de reclamar sentencias justas y en su caso modificaciones legislativas para que ello se produzca. - no sé qué adjetivo utilizar para calificar la situación en Ciudad Juarez.. Ahora debemos añadir continuas noticias de violaciones tanto en India como en los países árabes, vil recordatorio de nuestra ubicación social y de la valoración social de una mujer violada - "¿qué habrá hecho para que le pase eso?" "¿a quién se le ocurre ir a una manifestación?" "¿qué se le ha perdido en esos países?" - en casa se está mejor.

La última afirmación, sexismo aparte, tampoco es cierta. En nuestro país se siguen asesinando a mujeres no hemos conseguido detener estos asesinatos y estamos olvidando a los niños y niñas que viven a diario los maltratos - Mamá, duérmete que yo vigilo. Por si eso fuera poco surgen espontáneos que ayudan a mejorar nuestra situación Gallardón y el aborto o incluso se cuestiona la lactancia materna en público, bajo la excusa que no se escape la leche y caiga al suelo - somos realmente tan torpes? Es un milagro que sepamos abrocharnos el sujetador y ponernos las medias solas.

Y he dejado para el final el alquiler de vientres - no sólo en la India - es un negocio en auge y en que las mujeres quedamos reducidas a un container de bebés. Es comprensible la ilusión de una pareja por tener descendencia, pero si se lanzan hay que hacerlo con los ojos abiertos - mujeres obligadas por sus maridos a soportar varios embarazos para comprar electrodomésticos o para mantener un nivel de vida adecuado o directamente se estafa a la pareja que busca un bebé.

Resumiendo tiempos revueltos para las mujeres y para los derechos que otras mujeres consiguieron para nosotras. ¿Y qué estamos haciendo?, en general por supuesto, mirar las noticias, decir que esto no puede ser y seguir con nuestra vida. 

Estamos perdiendo las buenas costumbres de mujeres luchadoras, no hablo sólo de mujeres de izquierdas, hablo en general de las mujeres. Mi madre ama de casa, y votante del PP, ya se encargó de transmitirme un criterio moral mientras ella fregaba los platos - "hija que conmigo se acabe la raza de esclavas, ya ves que el trabajo de casa nadie lo valora, tú estudia y lucha para no depender de nadie"  

Viendo las nuevas generaciones y generalizando, cuando les pregunto  sobre los recortes sociales y los comentarios que se vierten sobre las mujeres - son casi unánimes las respuestas "sí, pero esos son unos imbéciles" nada tienen que ver con ellas ni ahora ni más adelante - su entorno familiar  las respalda, las leyes son para casi todo el mundo excepto sus hijas. Ya me deprime escuchar estos comentarios pero que las madres mantengan a sus hijas en un estado de "Peter Pan" y las madres actúen como "Campanilla" ya es demasiado. Las madres han luchado para ellas y para sus hijas, pero ahora ya no quieren que sus hijas luchen ,quieren que sus hijas lo tengan todo, sin esfuerzo, que sean felices y que no pasen por lo que ellas han pasado. Para mi un grave error, no sólo pasarán por lo que ellas han pasado sino por cosas peores visto el desarrollo de la sociedad; si no se  inculca la conciencia de lucha por ser mujer mientras los enlaces anteriores sigan vigentes en la red, recreamos el cuento de la criada perpetuando las desigualdades y las atrocidades, y eso no es un cuento.


Y por último una sugerencia, en la red se están recogiendo firmas para frenar determinadas actuaciones y políticas, si no has firmado ya, éste puede ser un buen momento - gracias.

Acabemos la guerra contras las mujeres en India  

No a la ley mordaza anti-mujeres